Sin duda, estamos viviendo años en los cuales la tecnología avanza de forma imparable, tanto así que incluso países desarrollados no han logrado legislar al respecto en aspectos como la privacidad y la tan nombrada inteligencia artificial.
La industria de la exportación no está lejana a estos avances y descubrimientos. Sin ir más lejos, la implementación de la tecnología y la robótica en la industria de la cereza es, ciertamente, una de las aplicaciones más visibles. Sin embargo, en materia de seguros de carga y procesos de recupero, la tecnología ha sido un elemento menos frecuente, que la industria no ha sido capaz de analizar y utilizar adecuadamente.
Uno de los pioneros en materia de tecnología y servicios ha sido, en efecto, el Grupo Maersk, quien hace más de cinco años lanzó al mercado un sistema llamado Captain Peter. Este sistema permite que los exportadores puedan visualizar las temperaturas, gases y setting de sus cargas en tiempo real. Este lanzamiento fue el primer paso en beneficio de los intereses de la carga, quienes constantemente tenían que lidiar con las compañías navieras a través de reclamaciones formales o incluso juicios arbitrales para exigir la entrega de la lectura del datalogger. Este dispositivo es capaz de almacenar y registrar el comportamiento de la unidad de refrigeración, con registros cada hora y por un período de tiempo de hasta cinco años.
La estrategia del ocultamiento, que por muchos años fue una gran barrera para la resolución de los reclamos de carga, estaría llegando a su fin con medidas como la liderada por el Grupo Maersk.
Tuvieron que pasar al menos tres años para que Hapag Lloyd, en conjunto con su nuevo sistema HLive, luego de su anuncio en 2019, pudiera realmente ver la luz y llegar definitivamente al mercado de exportación de Chile y Perú, en casi un 100% de su flota reefer. Es en este período, entre 2022 y 2023, cuando comienzan a sumarse otras navieras al uso de estas tecnologías, la mayoría buscando el mismo propósito: transparentar a los clientes los comportamientos de las temperaturas durante la travesía marítima, a cambio de una tarifa por contenedor.
Es así como Cosco, Evergreen, CMA CGM y ZIM Lines ya se encuentran terminando de implementar los dispositivos de transmisión en su flota reefer, que permitirán acceder a esta valiosa y útil información para los exportadores. Recientemente ha anunciado la incorporación de esta tecnología en toda su flota reefer, de la mano de Carrier, uno de los más grandes fabricantes de maquinarias de refrigeración: la compañía naviera ONE.
Rápidamente y sin mucha dificultad, podemos descubrir que en esta lista de compañías navieras que buscan colocar la tecnología al servicio del cliente tenemos un gran ausente. ¿Será que esta ausencia no es simple coincidencia y habla de una política instaurada dentro de esta compañía naviera? No es casualidad que el mayor número de procesos judiciales que actualmente administramos en nuestra empresa sea justamente con este transportista. A su vez, se han hecho acreedores de la peor tasa de éxito en materia de recuperos.
Somos una empresa con más de 15 años de experiencia en materia de recuperos de carga y, en efecto, somos un buen termómetro que permite medir y realizar un acertado diagnóstico respecto de la salud de una naviera al momento de tener que responder por perjuicios causados a exportadores, quienes colocan en sus manos productos de alta perecibilidad.
Son ustedes, nuestros clientes, quienes deberán juzgar y elegir correctamente al momento de definir las estrategias al inicio de cada temporada.
Ciertamente, en materia de seguros de carga, la posibilidad de acceder a las lecturas de los dataloggers, así como la tendencia alemana de la eliminación de la cobertura de retrasos en las pólizas, ha abierto un camino hacia el control de los riesgos del transporte que nunca antes había estado tan presente. La posibilidad de autogestionar los siniestros de carga, sin la necesidad de pagar primas de seguro por cada contenedor, ha generado una gran inquietud en la industria respecto de decidir por este camino.
Pero, ¿es realmente un riesgo para un exportador tomar la decisión de no asegurarse?
Hoy responder a esa pregunta es menos complejo, ya que llevamos más de dos años trabajando con exportadores que han dejado de lado los seguros tradicionales y han optado por prepararse, con la ayuda de expertos, en un plan estratégico de exportación.
Esto no solo implica la elección de la compañía naviera correcta, sino la revisión de los procedimientos internos, informes de consolidación, instalación y uso de termoregistros, estiba de carga, formas de venta y cómo documentarlas correctamente, entre otros.
En conclusión, sí creemos que es el momento adecuado para revisar y ajustar las estrategias en el ámbito de los seguros de carga y el manejo de reclamaciones, siempre y cuando las empresas estén dispuestas a revisar sus procedimientos, capacitar a su personal y reclamar sus cargas solo cuando los méritos sean reales. Otras figuras de trabajo serán solo más de lo mismo.
Creemos que el círculo virtuoso de los reclamos de carga es el próximo paso que debemos dar. Así como las navieras han decidido transparentar sus registros de temperatura en búsqueda de pagar correctamente y evitar los reclamos sin méritos, también es justo y prudente que los reclamos de carga estén cada vez mejor respaldados, con documentos que permitan esclarecer los hechos y que cada parte obtenga lo justo
Es un largo camino el que queda por recorrer pero, afortunadamente, ya hemos comenzado.